La variación salarial media pactada en los convenios que se han registrado en el primer trimestre de 2018 asciende al 1,53%, siendo del 1,27 % para los convenios de empresa mientras que para los de ámbito superior llega hasta el 1,54%. “Al cierre de 2017, la variación salarial pactada fue del 1,43%, con lo que en los tres primeros meses del año el incremento ha sido prácticamente nulo, con lo que los trabajadores no ven la recuperación en sus bolsillos. Y ello se une la incapacidad de CCOO, UGT y las patronales para alcanzar un acuerdo de negociación colectiva que realmente repercuta en beneficios para los trabajadores”, apunta Sara García, secretaria de Acción Sindical y Salud Laboral de USO.

Según los datos de la Estadística de Convenios Colectivos, que publica el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, la jornada media pactada para el total de los convenios se sitúa en 1.764,9 horas al año por trabajador. En el caso de los convenios de empresa, esta se reduce hasta las 1.716,9 horas, mientras que para los de ámbito superior a la empresa asciende hasta las 1.768,3 horas.

Del total de convenios registrados hasta marzo, que suman un total de 2.005, 1.486 son de empresa, y afectan a cerca de 335.000 trabajadores, y los 519 restantes corresponden a convenios de ámbito superior e integran a 4,6 millones de trabajadores. En total estos convenios tienen efecto sobre 5,02 millones de trabajadores.

En los tres primeros meses del año se han depositado 297 inaplicaciones de convenios, que afectan a 5.684 trabajadores, la mayor parte de ellas en el sector servicios (46,4%) y referidas a la cuantía salarial (59,9%).

El 91,9% de estas se han resuelto con acuerdo entre empresa y representantes de los trabajadores. El 88,5% de estas inaplicaciones se han presentado en empresas con plantillas de menos de 50 trabajadores, que son las que menos sindicalizadas están. en opinión de García, “a pesar de que las inaplicaciones han descendido en este periodo, la realidad nos demuestra que son las pymes las que están haciendo valer los privilegios que les otorga la Reforma Laboral para reducir los derechos laborales, generar indefensión y abaratar costes salariales. Desde la negociación colectiva, hay que seguir defendiendo que sea requisito indispensable el acuerdo entre empresa y representantes de trabajadores para permitir el descuelgue por causa económica, siempre y cuando la empresa presente pérdidas reales y no un mero descenso de beneficios”.