El secretario general confederal de la USO, Julio Salazar, ha salido al paso del catálogo de medidas lanzado en las últimas horas por el Fondo Monetario Internacional y las ha calificado de “recetas erróneas que, de aplicarse, acentuarían el drama social en España, devaluarían aun más el factor trabajo y harían más insoportable para la mayoría social los costes de la crisis”.

Julio Salazar ha puesto también el acento de la “escasa credibilidad” del FMI que, a lo largo de la crisis y en ocasiones anteriores, ha fallado estrepitosamente en sus recomendaciones e imposiciones en todos los rincones del mundo, habiendo sido continuas sus propias enmiendas a posteriori. Para el secretario general de la USO es una “temeridad lo que plantea el Fondo y desde luego espera que ni Bruselas ni Madrid tengan en consideración sus propuestas, para que a su vez no tenga que volver a lamentar la Directora General del FMI los errores cometidos”.

 

El organismo que dirige Lagarde ha planteado la necesidad de abaratar salarios, despidos, bajar cotizaciones sociales a cambio de subir impuestos directos, devaluar aun más la negociación colectiva, bajar las pensiones mediante la trampa del factor de sostenibilidad y, en definitiva, perseverar en unas recetas caducas que se han revelado inútiles para estimular el crecimiento y la generación de empleo. Todos recordamos como dichas recetas causaron en América Latina casi tres décadas de extraordinaria pobreza.

La USO insta a los poderes públicos a guardar en el cajón de los manuales antiguos las propuestas del FMI y poner sobre la mesa las recetas que recientemente han explicitado los sindicatos europeos durante la semana de movilizaciones convocada por la Confederación Europea de Sindicatos, CES, y que pasan por dar valor al empleo de calidad, la apuesta por sectores productivos que garanticen el desarrollo sostenible, reactivar la economía mediante la inyección de dinero aplicando políticas de estímulo y reactivar la dimensión social del acervo europeo.