Los trabajadores de USO, UGT y CCOO del sector de limpieza cántabro han decidido en dos asambleas en Santander y Torrelavega convocar movilizaciones por el inmovilismo de las patronales Arelca y Aspel en la última mesa de negociación del futuro convenio colectivo.

Este viernes, 15 de junio, a las 10 de la mañana, los trabajadores están llamados a concentrarse frente al Orecla, el servicio de mediación laboral cántabro, como primera acción de protesta. A esa hora están citados sindicatos y patronales para la próxima mesa negociadora. En ella, “priorizamos negociar un total de doce puntos del convenio colectivo, de los cuales solo tres son de contenido salarial. Sin embargo, la patronal se ha limitado a poner sobre la mesa un acuerdo a tres años, con subidas salariales del 0,7%, 0,75% y 0,8% anual respectivamente”, relata Gustavo Peña, coordinador de la Federación de Servicios de USO Cantabria.

USO, junto al resto de sindicatos implicados en la negociación, “considera absolutamente insuficiente esta oferta tras cuatro años de congelación salarial. Pedimos un 3% de subida anual, que ni siquiera es subida, sino recuperación”, continúa Peña. Además, hay otros factores desatendidos por la patronal en la negociación colectiva y que se refieren a cuestiones de mejoras laborales y sociales: “nosotros vemos imprescindible dentro de la negociación colectiva el aumento de jornadas parciales. El sector tiene 6.000 trabajadores en Cantabria, y un 90% son mujeres con jornadas parciales muy reducidas. Las nuevas ofertas de empleo, sin embargo, se cubren con nuevas contrataciones, en lugar de ofrecérselas a esas trabajadoras. Así aumentan la precariedad y las bolsas de pobreza, que se ceban sobre todo con las mujeres”, sentencia el coordinador de Servicios de USO Cantabria.