La relación directa que hace el Gobierno entre la representación sindical y la dificultad de las pequeñas empresas para crecer es “hipócrita, tendenciosa y hasta indecente”, sentencia Sara García de las Heras, secretaria de Acción Sindical y Salud Laboral de la USO.

En su último borrador del “Marco estratégico de la España industrial”, el Gobierno advierte de un escalón cuando las empresas quieren crecer por encima de los 50 trabajadores y lo achaca directamente al salto impositivo y a que la representación sindical ya se configuraría en forma de comité de empresa. “Que deban o quieran modificar el sistema fiscal para promover ese salto es otra historia, pero que quieran seguir penalizando la actividad sindical y promoviendo la desprotección de los trabajadores es muy diferente y gravísimo. Esto da una muestra más del despotismo de este Gobierno frente a los derechos laborales y la libertad sindical, tras el duro golpe que ya le asestó a la negociación colectiva en la última Reforma Laboral, de la cual aún no nos hemos repuesto”, continúa Sara García.

“Los problemas de una economía española tan estancada no se los pueden achacar a los trabajadores y a la defensa de sus derechos; la generación de empleo y el crecimiento de las empresas tiene más que ver con políticas económicas, inversión en I+D+i y educación. Todas ellas políticas en las que el Gobierno ha dejado mucho que desear como para echarle ahora la culpa a la parte social de tener paralizada la economía”, analiza la secretaria de Acción Sindical y Salud Laboral, quien es aún más rotunda en el pensamiento de la USO: “nuestro posicionamiento es radicalmente opuesto al planteamiento de este Gobierno. Ha sido precisamente la falta de sindicalización y representación uno de los motivos directos del aumento de la siniestralidad laboral. Los datos reflejan claramente que es en las empresas sin sindicalizar donde más accidentes de trabajo se registran”, concluye Sara García.