USOC ha convocado huelga indefinida a partir del 1 de julio en Celsa tras la celebración de varias asambleas de trabajadores en el centro de trabajo de Castellbisbal, que cuenta con una plantilla de más de 800 trabajadores, ante el desacuerdo con las propuestas empresariales en la negociación del convenio.

La dirección de la empresa pretende desregular la jornada de trabajo al plantear una modificación unilateral del calendario de trabajo y la distribución de la jornada con una bolsa de horas que se aplique de forma unilateral y sin garantías. Además, no se contempla la introducción de nuevos pluses que retribuyan aquellas actividades más penosas y el reconocimiento profesional de las actividades que se realizan como la polivalencia, etc.

Se ha solicitado la mediación del Departament de Treball, para que pueda mediar en este conflicto, que se produce cuando la empresa pretende empeorar el actual convenio en materia de flexibilidad laboral y absentismo.