Joaquín Pérez, secretario general de USO, ha mantenido un encuentro con Sharan Barrow, secretaria general de la Confederación Sindical Internacional (CSI) con motivo de la COP25. En la reunión ha participado también Javier de Vicente, secretario de Acción Internacional y Desarrollo Sostenible.

Por parte de los sindicalistas de USO se ha informado a Burrow sobre los problemas de la situación laboral española, deteniéndose en el sector del carbón y, en concreto, sobre los trabajadores de las empresas auxiliares del mismo que no están cubiertas por el Acuerdo del Carbón. De momento, aunque USO está trabajando para su integración, no está resuelto el futuro de cerca de 900 trabajadores de una treintena de empresas.

Por otro lado, la situación en Ryanair ha sido objeto de atención, sobre todo con respecto a sus métodos de subcontratación, la planificación agresiva de laminación de derechos laborales y la falta de regulación europea, con la permisividad de las autoridades laborales.

Joaquín Pérez también ha informado a la dirigente sindical australiana sobre la difícil situación de la industria del automóvil, con procesos de reestructuración severos en algunas empresas, además de otros procesos de automatización que afectan seriamente al empleo.

Sobre ellos, el líder de USO ha remarcado la necesidad de desarrollar procesos de Transición Justa en muchos sectores, sobre algunos de los cuales el sindicalismo tiene que extenderse para poder tener mayor capacidad de interlocución y negociación.

Sharan Barrow ha manifestado la voluntad del sindicalismo internacional de encabezar procesos de Transición Justa y de estar presentes en los mecanismos de planificación y control. Además, sobre los casos presentados por USO, ha manifestado el interés de la CSI en que el Acuerdo de Carbón en España sea extensible para todos los trabajadores que trabajan en el sector, independientemente de su relación contractual, de modo que sea un ejemplo para extenderlo a otros países. También Burrow ha referido la necesidad de que la nueva Comisión Europea recoja el guante y legisle nuevas normas que impidan casos como los de Ryanair, donde el mismo trabajo pueda ser realizado con distintos tipos de contratos y condiciones legales diferentes.