Este sábado volveremos a cambiar al horario de invierno. En la práctica, la madrugada del sábado al domingo, atrasaremos los relojes una hora, es decir, a las 3 serán las 2.

Será uno de lo últimos cambios de hora que tendremos que realizar tras la decisión de la Comisión Europea que ha propuesto acabar con estos adelantos o retrasos de hora. A la espera de conocer la decisión de la comisión de expertos creada para adoptar una decisión, probablemente habrá un cambio más, en marzo de 2019, para volver al horario de verano.  Será en abril de 2019 cuando todos los países europeos tengan que decidir qué horario eligen, si el de verano o el de invierno.

Sara García, secretaria de Acción Sindical y Salud Laboral de USO, defiende que “ya que se ha abierto el debate sobre los horarios, sería también necesario trabajar en la racionalización de horarios, porque no sirve de nada si continuamos manteniendo unas jornadas de trabajo que no permiten la conciliación de la vida familiar y la profesional”.

Además, García reitera que “los cambios de hora tienen una especial incidencia en la salud de los trabajadores, debido a que estos cambios, por muy puntual que sea, modifica y afecta al descanso y los bioritmos, con consecuencias que se extienden durante como mínimo tres días”.