Cientos de trabajadores del transporte sanitario de las cinco provincias de Castilla-La Mancha se han manifestado hoy en Toledo para denunciar la insostenible situación que atraviesa el servicio de ambulancias y exigir mejoras laborales.

A las 12:00 ha partido la manifestación, convocada por USO Castilla-La Mancha, junto a CCOO y SIBF, de la plaza de Zocodover y ha concluido en torno a las 13.00 horas, en el Paseo del Tránsito.

El secretario de Acción Sindical y Salud Laboral de USO Castilla-La Mancha, Juan José Coronas, ha exigido que los trabajadores del transporte sanitario de la región sean escuchados y se tomen medidas debido a que la situación del sector “es inaguantable”. “Nosotros no somos conductores ni camilleros, somos técnicos en emergencias sanitarias y queremos que se nos reconozca nuestra categoría laboral”, ha manifestado.

Por ello, espera que se tomen las medidas que sean necesarias para que el transporte sanitario de la región “sea reconocido por la calidad del servicio y de los profesionales que luchan día a día”.

Las empresas que resultaron adjudicatarias de las concesiones ofertaron en sus plicas descuentos de entre el 8% y el 13% sobre el precio de licitación. Así, en total, las ofertas ganadoras sumaron 233 millones de euros; 25 millones menos de los presupuestados por el Gobierno.

Por ello, los sindicatos reclamamos a la Junta de Castilla-La Mancha que dedique esos 25 millones a introducir mejoras en la calidad de servicio y en el empleo que se presta en el mismo, algo imprescindible porque las bajas ofertadas por las empresas solo están conllevando incumplimientos tanto del convenio colectivo como de las condiciones de prestación del servicio establecidas en los pliegos.

Desde USO hemos denunciado las malas condiciones de trabajo de los trabajadores y la pérdida de poder adquisitivo que llevan años soportando. Para ello, exigen condiciones laborales equitativas en las cinco provincias; bases de trabajo en condiciones habitables, equipos de seguridad y vehículos dignos; y acabar con el uso y abuso de los contratos en prácticas y con asedio a los trabajadores por parte de las empresas.