A pesar de los progresos, como la reforma del artículo 49 de la Constitución, persisten desafíos en inclusión laboral y en la defensa de los derechos de las personas con discapacidad

En este 3 de mayo recordamos que, si bien es cierto, España ha avanzado en los últimos años en la protección y garantía de los derechos de las personas con discapacidad, aún quedan mucho para terminar con las condiciones de discriminación histórica que sufrieron y siguen sufriendo. Así lo ha visibilizado el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) en “Derechos Humanos y Discapacidad, Informe España 2024“.

Dentro de los avances que se destacan, encontramos, la modificación al artículo 49 de la Constitución, eliminando el uso de lenguaje discriminatorio. Además, se han establecido compromisos sólidos en la materialización de los derechos de las personas con discapacidad, incorporando un enfoque centrado en la autonomía personal, inclusión social y accesibilidad universal, además de mandatar la valoración interseccional de las necesidades y estrategias para atender a las necesidades de este grupo de población.

En contraposición, el CERMI señala dentro de los asuntos pendientes, la necesidad de:

  • la incorporación del braille en productos de consumo;
  • la garantía de vivienda digna y adecuada para las personas con discapacidad;
  • la necesaria derogación de las prácticas que permiten el internamiento forzoso de las personas con discapacidad psicosocial;
  • trabajar en la prevención y atención especializada de violencia contra niñas y mujeres con discapacidad y combatir la esterilización forzosa, e
  • identificar y atender adecuadamente a personas refugiadas y solicitantes de asilo con discapacidad.

Sólo el 35% de las personas con discapacidad trabajan

De acuerdo con los datos del INE, el 6,21% de la población en España en 2024, tiene algún tipo de discapacidad. De éstas, el 45,58% tienen una discapacidad física mientras que el 16,19%, una discapacidad mental.

La tasa de actividad de las personas con discapacidad es del 35,5% lo cual nos demuestra una enorme diferencia respecto de la población en general cuya tasa de actividad es del 75,8%.

¿Qué ocurre si analizamos el mercado laboral de las personas con discapacidad? Los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social nos permiten ilustrar, en términos generales, la situación de las personas con discapacidad en España.

Así, la tasa de empleo de las personas con discapacidad en 2024 fue del 28,5%. Las personas con discapacidad afiliadas a la Seguridad Social el pasado año representaron el 1,59% del total de la afiliación, con un total de 336.073 personas afiliadas (el 41,91%, mujeres, frente al 58,09%, hombres).

El 92,23% de las personas con discapacidad afiliadas a la Seguridad Social se encontraban en el régimen general y, en su mayoría, incorporadas al sector de servicios. Las actividades desarrolladas principalmente por las personas con discapacidad son: servicios a edificios y jardinería (52.548); servicios sociales sin alojamiento (41.263); actividades administrativas de oficina y otras actividades auxiliares a las empresas (23.107), y comercio al por menor excepto de vehículos de motor y motocicletas (20.433).

En 2024, hubo un total de 271.765 contratos de trabajo para personas con discapacidad (1,76% del total de la contratación nacional). De estos contratos, el 59,11% se realizaron a hombres y el 40,89%, a mujeres. De las personas con discapacidad contratadas, la mayoría tiene una discapacidad física (45,12%) mientras que la discapacidad psíquica, sensorial o del lenguaje ocuparon el 16,25%

El tipo de contratación de las personas con discapacidad en su mayoría fue a jornada completa, representando el 53,43% de los contratos. En segundo lugar, la jornada parcial con un 35,17% y, finalmente, el 8,40% de fijos discontinuos.

Personas con discapacidad en paro

Las personas con discapacidad en situación de desempleo en 2024 fueron 135,417, constituyendo el 5,29% del total de personas en esta situación a nivel nacional.

La tasa de paro para el caso de hombres que se situó en 19,90% y para las mujeres fue de 19,40%. De acuerdo con la duración de la demanda de empleo, el 43,26% de las personas con discapacidad en esta situación llevan más de 24 meses desempleadas.

USO, comprometido con la inclusión y autonomía de las personas con discapacidad

Desde USO queremos recordar que tenemos mucho que hacer en materia de derechos de las personas con discapacidad. Si bien hemos avanzado y, como los datos reflejan, las personas con discapacidad tienen representatividad en el mercado laboral, no podemos perder de vista que, en muchas de las ocasiones, sufren situaciones abusivas en los espacios de trabajo, además de ser objeto de discriminación y distinciones debido a las condiciones estructurales.

“Por ello, necesitamos establecer estrategias que socialmente nos permitan reconocer y valorar el trabajo de las personas con discapacidad. Hay que eliminar cualquier enfoque paternalista e incorporar una visión de autonomía e independencia que les permita desarrollar un proyecto de vida propio y seguir consolidando políticas integrales de atención a la discapacidad que permitan una plena inclusión, autonomía, accesibilidad y desarrollo integral”, reivindica Lourdes Pedrazuela, secretaria de Políticas Sociales, Igualdad y Formación de USO.