Hasta septiembre se produjeron 524 muertes en el trabajo, un 15,9% menos que en 2022, y 2.779 accidentes graves en jornada y 693, in itinere

Hasta el mes de septiembre, según datos ofrecidos por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, se ha producido un descenso en las muertes y accidentes graves en el trabajo. También en el número de accidentes de trabajo con baja, que alcanzaron la cifra de 468.075, lo que supone una reducción del 1% con respecto a 2022. Sin embargo, en el lado opuesto, en los nueves primeros meses del año el número de accidentes de trabajo sin baja aumentó un 1%, hasta los 423.550.

Si continuamos analizando la Estadística de Accidentes de Trabajo, de los accidentes con baja, se produjeron 405.724 en jornada de trabajo y 62.351 accidentes in itinere. La variación en relación al mismo periodo del año anterior se situó en el -2,3 % para los accidentes en jornada y en el 8,8 % para los in itinere.

Del total de accidentes durante la jornada, 431 tuvieron como resultado la muerte del trabajador y 2.779 fueron calificados como graves. Comparando las cifras con el mismo periodo de 2022, son 83 fallecimientos y 98 accidentes graves menos.

Si tomamos estos datos a nivel global, el descenso en el número de muertes y en el de accidentes de trabajo graves, siempre es positivo. Sin embargo, desde USO exigimos que se trabaje para que estas cifras, además de seguir en descenso, lo hagan en cifras realmente significativas que sean consecuencia de una adecuada gestión e implementación de las medidas preventivas por parte de las empresas; una concienciación aún mayor por parte de las personas trabajadoras y un control más estrecho por parte de las Administraciones Publicas que garantice la correcta aplicación y cumplimiento de la normativa vigente.

Industria y construcción, sectores con más accidentes y muertes en el trabajo

Analizando los datos por sector de actividad, los accidentes de trabajo con baja en jornada laboral, siguen la misma tendencia que en 2022, con la excepción del sector de actividades sanitarias y servicios sociales, donde se ha registrado un descenso cercano al 50 %. El resto de sectores nos deja las siguientes cifras:

  • Industria manufacturera: 71.672
  • Construcción: 63.671
  • Comercio y reparaciones de vehículos: 52.808

Por otro lado, los accidentes mortales, por sector de actividad, aún teniendo en cuenta el descenso en la cifra de fallecidos, sigue concentrándose en los mismos sectores:

  • Construcción: 92
  • Transporte y almacenamiento: 78
  • Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca: 57

Aumentar el control para los sectores con mayor siniestralidad

Desde USO consideramos que, teniendo en cuenta las cifras y su distribución en los distintos sectores de actividad, queda claro cuáles los que requieren más control a la hora de verificar el cumplimiento de la normativa e, incluso, un análisis más profundo de las causas para poder confeccionar normativa más especifica que regule la prevención en ellos.

La construcción es un sector que, históricamente, ha acumulado las cifras más altas en cuanto a siniestralidad laboral se refiere. A pesar de contar con normativa específica adaptada a las características de la actividad, sigue manteniendo el liderazgo. Desde USO reclamamos un control más riguroso y exhaustivo de la aplicación y cumplimiento de las normas vigentes.

Las actividades de transporte y almacenamiento, con el aumento experimentado en los últimos años, concentran condiciones laborales más precarias, lo que se traduce en una aplicación escasa de la normativa en Prevención. Este sector requiere un análisis profundo por parte de los agentes implicados para poder realizar un control efectivo de los riesgos que se encuentran en esta actividad.

En cuanto a las actividades de ganadería, pesca, agricultura y silvicultura, al tratarse, mayoritariamente de actividades localizadas en núcleos de población dispersos y aislados, hace más complicado su control. Esta realidad nos lleva a la reflexión de la existencia de la necesidad de impulsar la seguridad y salud en el trabajo desde los entes locales o provinciales que son los que, por proximidad y conocimiento de la realidad laboral de la región, pueden conseguir una efectiva aplicación de la norma y una concienciación de las personas trabajadoras.

Más implicación de las Administraciones

El desglose de los datos, tanto a nivel de accidentes en jornada con baja como con resultado de fallecimiento, continua con la misma tendencia, siendo las comunidades que encabezan ambas estadísticas:

 

Desde USO reclamamos una mayor implicación de las Administraciones a nivel autonómico para conseguir, a través de las diferentes acciones que puedan implementar, una rebaja en las cifras de la siniestralidad de las diferentes regiones.

La correcta aplicación de la normativa en Seguridad y Salud Laboral es responsabilidad de todos; de las Administraciones públicas velando por el cumplimiento y el control; de los sindicatos, reclamando mejoras en las condiciones de trabajo, y de las personas trabajadoras, verificando que se cumplen las condiciones correspondientes.