En el Día Internacional para la Erradicación de la pobreza, USO alerta del aumento de la pobreza laboral y la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores

Este 17 de octubre, Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, USO valora la mejora en los indicadores en España, aunque alerta del aumento de la pobreza laboral.

Importante reducción en los principales indicadores de desigualdad

El informe elaborado anualmente por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN) revela en la edición de 2023 una notable reducción de la tasa de riesgo de pobreza o exclusión social (AROPE por sus siglas en inglés). Esta tasa sitúa al 26% de la población en España, unos 12,3 millones de personas, en riesgo de pobreza o exclusión social, lo que supone un descenso de 1,8 puntos porcentuales con respecto al año anterior en el que la tasa alcanzaba el 27,8%. Esto significa que unas 840.000 personas han dejado de estar en riesgo de pobreza y/o exclusión social este año.

Esta mejora se refleja en los tres componentes de la tasa AROPE:

  • Por un lado, ha descendido la tasa de riesgo de pobreza, pasando del 21,7 % del 2022 al 20,4 % actual. Esta reducción ha situado la tasa a niveles del año 2009, es decir, previo a las dos últimas crisis económicas. A pesar de esto, 9.676.000 personas viven en pobreza con ingresos inferiores a 10.088.
  • En cuanto a la carencia material y social severa, ésta desciende por segundo año consecutivo al 7,7 % de la población; es decir, 3,65 millones de personas. Sin embargo, la pérdida de poder adquisitivo se refleja en los datos a través del aumento de algunos de los ítems relativos a la carencia material. Así, por segundo año consecutivo, sube el número de personas que no han podido mantener una temperatura adecuada en su hogar (un 17,1 % frente al 14,3 % de 2021). También se incrementa en 0,7 puntos el número de personas que no pudieron permitirse una comida con carne, pollo o pescado cada dos días. Del mismo modo, también se observa un incremento significativo entre las personas que llegan con dificultad a fin de mes, pasando del 44,9 % que declaraba algún tipo de dificultad en 2021 al 47,8 % actual.
  • El número de personas con edades entre los 0 y 64 años que viven en hogares con baja intensidad en el empleo también disminuyó, mientras que en 2021 fue del 11,6 %, este año se sitúa en el 8,6 %.

España, entre los países con más pobreza laboral de Europa

Entre los datos a resaltar del Informe de EAPN está la mejora en el indicador de personas que viven en hogares con baja intensidad en el empleo, lo que muestra que el número de personas con contrato ha aumentado, pero con empleos parciales y con sueldos bajos que dificultan llegar a fin de mes. A esto se le añade la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores, situando a España entre los países desarrollados donde los salarios reales caen más debido a la inflación.

En un estudio reciente, se recoge que España tiene una de las tasas de pobreza laboral más altas de Europa, y va en aumento. El 16 % de los hogares con personas trabajadoras son pobres y esta pobreza se asocia principalmente a salarios bajos y periodos de inactividad o desempleo de uno o más miembros del hogar, así como a las reducciones de jornada y/o salario.

Cabe destacar el aumento desde el año 2005 del riesgo de pobreza laboral en hogares donde viven jóvenes de entre 18 y 35 años, siendo especialmente elevado en los hogares donde el sustentador es menor de 35 años (un 23 % de estos hogares están en riesgo de pobreza).

La pobreza laboral en España es fruto de una combinación entre inestabilidad laboral, bajos salarios y políticas familiares insuficientes. En el 65 % de los hogares se asocia a bajos salarios y/o desempleo, mientras que en el 35 % de casos restantes se asocia al exceso de carga en el hogar.