USO se suma la conmemoración del Día Mundial de los Refugiados y a la lucha por acabar con las situaciones que los provocan

USO se une a la conmemoración del Día Mundial de los Refugiados, el 20 de junio. Denunciamos que la existencia de personas refugiadas viene derivada, en buena parte, de la falta de democracia, libertades y de la existencia de violencia en muchos lugares del mundo. Todos los datos apuntan a que los nuevos refugiados son, desgraciadamente, sufridores de estas causas en sus países o territorios de origen.

Cambio climático, raza y/o sexo

Las causas que llevan a los refugiados a tener tal condición son diversas. Por un lado, ya está asumido el desplazamiento y la búsqueda de refugio de personas afectadas por el cambio climático. La elevación de las aguas del mar ha puesto en cuestión ya la existencia de un estado, Kiribati; mientras que las sequías y deforestación llevan a otras personas a huir de sus hogares.

En otros casos, es la diferenciación sexual o el matrimonio forzado, o la pigmentación de la piel -como es el caso de los albinos,- o el puro racismo, lo que obliga a las personas a buscar protección y refugio en otros países. Esto pone de manifiesto la necesidad de universalizar valores y comportamientos democráticos, inclusivos y cohesionadores. Pero mientras tanto, es necesario apostar por el refugio.

La situación de los refugiados en España

España es un país que, a lo largo de su historia, ha provocado mucho exilio de sus nacionales. Por tanto, tiene el deber de acoger a los refugiados que huyen y propiciar políticas internacionales que contribuyan a una mayor justicia social.

Aún, España no ha cumplido con su compromiso con la UE de reubicación y reasentamiento de refugiados y las cifras anuales de concesión de estatus de refugiado es una de las más pequeñas de Europa. En 2019, y según los datos hechos públicos por el Ministerio del Interior, se alcanzó una cifra récord en España en el número solicitudes de protección internacional, con un total de 118.264 peticiones formalizadas.

Pero, sin embargo, disminuyó la tasa de reconocimiento de la condición de refugiados, pues únicamente el 5 % de las propuestas de resolución de la Oficina de Asilo y Refugio (OAR) recomendaron la concesión del estatuto del refugiado o la protección subsidiaria, lejos de la tasa de reconocimiento del 26 % de 2018.

USO, como miembro de la Asamblea de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), quiere contribuir desde esta estructura a mejorar las garantías de protección y refugio en España. Denunciamos la situación -ya existente antes del estado de alarma-, de los miles de refugiados pendientes de resolución de sus demandas de asilo y protección, con unos servicios de tramitación escasos de personal y colapsados.

Por ello, USO reclama agilidad en los trámites y medidas urgentes para que todas esas personas puedan, cuanto antes, tener una vida lo más cercana a la normalidad, derecho al trabajo, al estudio, a reencontrarse con sus familiares, para restablecer su vida cotidiana.