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El 71% de los trabajadores están expuestos al calor como riesgo laboral sin protocolos preventivos adecuados

En plena crisis climática, el incremento de las altas temperaturas se ha convertido en una amenaza creciente para la salud y la seguridad de las personas trabajadoras. Desde USO denunciamos que el calor extremo, en trabajos al aire libre o en entornos donde la climatización es insuficiente, no debe considerarse un riesgo “natural” sino laboral que requiere medidas preventivas urgentes.

El incremento de las altas temperaturas es más que una cuestión ambiental: es un riesgo real para la salud y seguridad de las personas trabajadoras. Según datos de la OIT, en todo el mundo aproximadamente 2.410 millones de trabajadores -el 71% de la población activa- están expuestos a niveles de calor excesivo en sus trabajos.

Más de 600 bajas laborales por accidentes o episodios de calor extremo en los últimos 5 años

La exposición a altas temperaturas en el entorno laboral es un riesgo que afecta la salud y la seguridad de miles de trabajadores en España. Según datos de organizaciones sindicales y organismos especializados, en los últimos cinco años se han registrado cerca de 619 bajas laborales por accidentes o episodios relacionados con el calor extremo y 9 fallecimientos en el ámbito laboral por esta causa. Estas cifras evidencian que, pese a algunas mejoras en la organización y en la prevención, las condiciones de trabajo durante las olas de calor siguen siendo críticas.

Durante el verano de 2024 se contabilizaron 111 accidentes laborales con baja por altas temperaturas, lo que contrasta con los 222 casos reportados en 2023. Además, en el verano de 2022 se llegó a registrar un récord con 5 accidentes mortales y 168 bajas por episodios asociados al calor. Estos datos, reflejados en informes sindicales, subrayan la urgente necesidad de adoptar medidas más contundentes en la prevención de estos riesgos.

Por otro lado, el Ministerio de Sanidad, en el marco del Plan Nacional de Actuaciones Preventivas de los Efectos del Exceso de Temperatura 2025, ha fijado umbrales de riesgo específicos para cada territorio. Por ejemplo, en algunas zonas de Andalucía, como en áreas de Córdoba, se sitúan umbrales críticos superiores a 40°C, lo que evidencia la magnitud del desafío en regiones donde el clima se calienta de forma exacerbada.

Sectores expuestos a niveles de calor que ponen en riesgo la salud de las personas trabajadoras

La realidad es que, en verano, numerosos sectores quedan expuestos a niveles de calor. Además de aumentar el riesgo de deshidratación, golpes de calor y fatiga, incrementan la probabilidad de accidentes laborales.

Estudios recientes han evidenciado que cuando la temperatura supera los 30 °C, el índice de accidentes aumenta significativamente. Las cifras son más alarmantes cuando se superan los 38 °C. Estas cifras nos obligan a exigir medidas de protección y protocolos actualizados que, en muchos casos, siguen siendo insuficientes en la práctica.

Desde USO manifestamos que es imprescindible cumplir a rigurosamente la legislación en materia de prevención de riesgos laborales. El Decreto-ley 4/2023 obliga a las empresas a tomar medidas específicas en trabajos al aire libre o en ambientes no climatizados cuando se produzca una alerta de calor. Estas medidas deben incluir:

  • la adaptación de los horarios de trabajo,
  • planificación de pausas activas,
  • provisión de agua y zonas de descanso adecuados, y
  • reubicación o modificación de turnos en situaciones de extrema exposición.

USO rechaza que se minimice el riesgo del calor extremo y hace un llamamiento a la Administración y a las empresas para que negocien y apliquen protocolos de prevención. La falta de medidas adecuadas no solo incrementa las bajas laborales y el peligro de accidentes, sino que también vulnera el derecho a la salud. Además, es importante que la negociación colectiva incluya cláusulas específicas sobre protección frente a episodios de altas temperaturas. Solo así se garantiza una respuesta coordinada y efectiva.

No basta con protocolos, hay que asegurar su cumplimiento

Frente a la realidad del cambio climático, con olas de calor cada vez más intensas y frecuentes, exigimos que las autoridades de inspección y control actúen con rigor. No basta con diseñar protocolos. Es esencial asegurar su cumplimiento a través de sanciones contundentes en aquellas empresas que no adopten las medidas necesarias. De igual forma, capacitar y concienciar a los trabajadores es clave para que conozcan sus derechos y sepan cómo protegerse en situaciones de calor extremo.

Desde USO reafirmamos nuestro compromiso con la salud y seguridad de las personas trabajadoras. Invitamos a todos a sumar esfuerzos para que el calor, como cualquier otro riesgo laboral, se trate con la seriedad y prioridad que requiere. Solo a través de una acción coordinada y de una verdadera voluntad para adaptar las condiciones de trabajo podremos garantizar entornos laborales dignos y seguros frente a los desafíos del cambio climático.