• Mientras el Congreso cada vez representa a más opciones, la Ley Orgánica de Libertad Sindical sigue favoreciendo solo a dos sindicatos
  • USO pide a los partidos una campaña limpia y con propuestas

A solo un par de días del inicio oficial de la campaña electoral, que en esta ocasión ha sido un estado continuo desde las anteriores elecciones, desde la Unión Sindical Obrera su secretario general, Joaquín Pérez, quiere pedirles a los diferentes líderes “que la campaña no trate únicamente de vetos o posibles alianzas, de fichajes y ocurrencias repentinas, como hemos visto hasta ahora. Esperamos que se hable de las grandes propuestas y reformas a largo plazo, con menos rédito de votos, pero con sentido de Estado, centradas en el empleo de calidad; en la sostenibilidad del sistema de protección social y pensiones; en la lucha contra la desigualdad; además de acometer una ambiciosa reforma fiscal y la necesaria lucha contra el fraude”.

En el marco de estas reformas de calado, Joaquín Pérez le pide a quienes se encarguen de formar o apoyar gobiernos “que se atrevan al fin a emprender la transición sindical que lleva pendiente más de treinta años. La Ley Orgánica de Libertad Sindical tuvo un tiempo y un porqué al inicio de la democracia, pero ahora esa democracia ya está madura y debe llegar a todos los ámbitos, también al sindical. Todo el mundo ha valorado que se abra el abanico de opciones políticas y el Congreso no sea ya cosa de dos, sino un arco plural. Pero en cuanto a la representación de los trabajadores, seguimos anclados en el bisindicalismo, con unas exigencias de porcentajes para ser representativo que no se dan en el Parlamento, donde un partido puede tener grupo propio y participar en las decisiones con el 2% de la representatividad estatal, mientras a nosotros nos piden un 10% y, además, nos ponen palos en las ruedas para conseguirlo, con prebendas que la LOLS les otorga solo a dos sindicatos”.

Así, el secretario general de USO se reafirma en que “precisamente el Diálogo Social necesita más voces, más ideas, más propuestas. Su modelo cerrado es tan caduco que todos los llamados ‘viernes sociales’ se aprobaron a golpe de decreto por el Gobierno, sin pasar por esa mesa ineficaz”.

Por último, Joaquín Pérez recuerda que “USO es un sindicato independiente, apartidista, no afín a ninguna opción política, por lo que les hemos hecho llegar nuestras propuestas y estamos dispuestos a colaborar con todos los partidos. No pedimos el voto para nadie ni nadie lo hará en nombre de la USO. Pero sí que, en nuestra responsabilidad como actor social, hacemos un llamamiento a todas las fuerzas políticas para que la campaña electoral sea limpia, propositiva y constructiva, que no se persiga fomentar odios y crispaciones, sino buscar el necesario consenso”.

NdP El secretario general de USO, Joaquín Pérez, pide una transición sindical tras las elecciones generales