El Gobierno ha aprobado la convocatoria de 33.793 plazas para la Administración General del Estado, Fuerzas Armadas, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Justicia y Educación. Es la convocatoria más multitudinaria desde 2008, y que supone “un alivio al gran déficit de personal que hay en el conjunto de las administraciones, y especialmente en la AGE, que no ha tenido posibilidad de maniobra en las reposiciones, como sí lo han tenido las administraciones y ayuntamientos”, señala Luis Deleito, secretario general de la Federación de Empleados Públicos de la USO.

Un alivio, porque, a pesar del abultado número de plazas, no llega a paliar las plazas perdidas en estos últimos diez años por jubilaciones y otros supuestos, y que ascendieron a 36.512 vacantes sin reponer. “El problema es que si esto se hace una vez cada 20 años, en dos o tres años tendremos el mismo problema. Hoy más o menos se iguala el conjunto de plazas, pero durante muchos años se ha jugado con reposiciones del 0 o el 5% hasta que llega este momento en el que hay que sacar de golpe 34.000 puestos. Hay que hacer un plan de reposición en los próximos años del 120 o 130%, no del 100, para volver al menos a la plantilla mínima”, aclara Deleito.

La de la AGE “es una plantilla muy envejecida, con mucha gente cercana a la jubilación, y eso debe estar previsto, ya que estamos a las puertas de otra pérdida brutal de efectivos”, advierte el secretario general de FEP-USO. De hecho, la propia ministra ha explicado que en 2019 el 14% del personal cumplirá los requisitos para poder jubilarse. Habla, además, de una edad media del funcionariado de 52 años, en una plantilla total de 135.476. Según los cálculos presentados, en la próxima década se jubilará el 51% de ese personal, porcentaje que sube en 10 puntos al hablar de los auxiliares administrativos.

Por ello, Luis Deleito incide en que “la de este año será una pequeña solución para un gran agujero. Esperamos que el año que viene vuelva a darse una oferta pública de empleo acorde con las necesidades de reposición previstas y pasadas, porque se está generando un vacío muy importante en cuanto a la atención al ciudadano”.