En el Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo, que se celebra el 29 de octubre, USO defiende políticas que garanticen el bienestar, autonomía e independencia de las personas

El 10 de junio de 2023, la Asamblea General de las Naciones Unidas en su resolución A/77/L.81 proclamó el Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo. En esta resolución se pone en valor el trabajo en materia de cuidados y se reconoce que estas actividades han sido invisibilizadas, infravaloradas e históricamente una carga para las mujeres.

Del mismo modo se reconoce que el apoyo es esencial para que las personas con discapacidad, adultas mayores y con problemas de salud mental puedan tener una vida independiente y resiliente. Para ello, se deben promover políticas de cuidados y apoyo que garanticen el bienestar, autonomía e independencia de las personas.

Fomentar la corresponsabilidad en las tareas de cuidados

La visibilización del trabajo en materia de cuidados ha sido no remunerado. En ese sentido es imprescindible fomentar la corresponsabilidad en estas tareas, lo cual constituye una estrategia para la construcción de relaciones equitativas. Para ello, es imprescindible establecer una infraestructura sostenible, políticas de protección social y servicios sociales accesibles, asequibles y de calidad, incluidos los de cuidado y guardería y las licencias de maternidad, de paternidad o parentales.

En esta resolución también se destaca el hecho que las personas que prestan servicios de apoyo y cuidados en su mayoría son mujeres en situación de vulnerabilidad. Entre ellas, mujeres migrantes, quienes tienen peores condiciones laborales y atraviesan condiciones de discriminación múltiple.

En ese sentido, se insta a los Estados miembros a que reconozcan el trabajo de las personas cuidadoras como esenciales y se adopten medidas que combatan los estereotipos de género, raza, etnia, edad y estatus migratorio relacionados con los cuidados y el apoyo, para reducir la segregación ocupacional en el trabajo del cuidado. Es necesario facilitar la transición del trabajo informal al formal y el trabajo decente, también en lo que atañe al trabajo del cuidado y doméstico remunerado, y crear empleos de calidad en la economía del cuidado y aumentar la recompensa y representación de los trabajadores domésticos remunerados, incluidos los cuidadores. También, hay que hacer efectivo el derecho de las mujeres al trabajo y los derechos en el trabajo de quienes tengan responsabilidades de cuidados, incluida la igualdad de remuneración por trabajo de igual valor.

En ese sentido, se identifica que la corresponsabilidad en tareas de cuidados y apoyo se traduce en el empoderamiento de las mujeres y las niñas, y además permitirá que los hombres se impliquen en este tipo de tareas, creando relaciones equitativas.

Es por ello que en el Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo celebramos este día y recordamos la importancia de éstos y su contribución clave a la consecución de la igualdad de género y la sostenibilidad de nuestras sociedades y economías, y sobre la necesidad de invertir en una economía del cuidado resiliente e inclusiva, incluido el desarrollo de sistemas de cuidados y apoyo sólidos y resilientes.

¿Qué se ha hecho en España en materia de Cuidados?

En agosto de 2023 se dio a conocer el Documento de Bases por los Cuidados, liderado por el Instituto de las Mujeres y fue el resultado del trabajo de la Mesa asesora por los cuidados, en la que participó USO junto con organizaciones de la sociedad civil, actores de la negociación colectiva, instituciones académicas e investigadoras, así como gubernamentales.

Este documento se estructura en 8 capítulos y pretende establecer las bases de una sociedad basada en la organización de los cuidados, que ponga a las personas en el centro y cuyo objetivo es inspirar un Sistema Estatal Público de Cuidados.

A través de este documento se pretenden sentar las bases para configurar el derecho al cuidado y desarrollar ese sistema público estatal integral, que requiere de una transformación cultural y de un cambio de paradigma sustentado en el valor de los cuidados.

Los cuidados, una asignatura pendiente

A día de hoy, los cuidados siguen siendo una asignatura pendiente. Y para muestra basta un botón: de las personas ocupadas a tiempo parcial por motivo de jornada parcial por el cuidado de personas dependientes a su cargo, aproximadamente el 94 % son mujeres, de acuerdo a la EPA del segundo trimestre de 2023. Además, de acuerdo con datos de la Seguridad Social, el número de excedencias en el primer semestre del 2023 fue de 17.140, de las que de las que 14.839 correspondieron a mujeres (86,6 %), y 2.301 a hombres (13,4 %).

De esta forma, podemos afirmar que es necesario redoblar esfuerzos por lograr una corresponsabilidad real en los cuidados. Y para lograr este objetivo, el trabajo con hombres es fundamental. Debemos de continuar luchando contra los estereotipos y roles de género tradicionales que, en gran parte, son la explicación a estas cargas de trabajo dobles, y hasta triples, de las mujeres, que obviamente no son remuneradas.

Además, debemos de trabajar por proteger a profesionales que desarrollan tareas de cuidados, quienes experimentan en muchos casos condiciones laborales precarias, horarios de trabajo extenuantes, falta de apoyo y de cuidado en su salud mental y, en muchas ocasiones, remuneraciones “en b”, con lo que los derechos laborales son nulos.

Es por ello que debemos seguir trabajando por lograr condiciones de trabajo dignas e igualitarias, mismas que no deben ser olvidadas en la confección de una política europea de cuidados.