La Unión Sindical Obrera considera que los incentivos a la contratación y fiscales anunciados por el presidente del gobierno en el reciente debate sobre el Estado de la Nación, constituyen un elemento positivo pero cargado más de buenas intenciones y de propósitos electorales que de efectividad real.

Para la USO, que se intente fomentar la contratación indefinida siempre es una buena noticia y que se alivie la carga fiscal sobre las rentas más modestas también. Ahora bien, existen datos de nuestra situación económica que nos hacen pensar que su efectividad va a ser muy limitada.

La llamada “tarifa plana” de 100 euros en cotizaciones a la Seguridad Social para nuevos empleos de carácter indefinido presenta dos inconvenientes: los empresarios no van a contratar por el hecho de que sea más barato si no tienen una necesidad real de crear empleo fruto de un incremento de su actividad, esto es, de aumentos de demanda.

Los datos conocidos del incremento del PIB en el último trimestre, una décima menos de lo esperado, explican que la demanda interna no acaba de acelerar y va a ser muy difícil que con esa atonía se vaya a producir un incremento significativo de la contratación por mucha rebaja de cotizaciones que exista.

En segundo término la picaresca puede hacer que empresarios quieran beneficiarse de dicha tarifa plana y reduzcan jornada a trabajadores a tiempo completo para generar un nuevo puesto con tarifa plana. Por ello la USO propone al gobierno que la regulación de dicha tarifa contemple como método de cómputo de generación de empleo indefinido el número de horas trabajadas en lugar de el número de empleos os pena de garantizar una correcta inspección en la aplicación de dicho beneficio.

Por ultimo la USO alerta de que el incentivo a la contratación minora a corto plazo los ingresos del Sistema de la Seguridad Social, hecho que no parece muy conveniente para las cuentas y la sostenibilidad de servicios públicos de calidad, en un momento en el que el número de cotizantes es alarmantemente bajo.