La Secretaría de Igualdad de USO defiende la conciliación y la corresponsabilidad para reducir las desigualdades entre hombres y mujeres

Desde 2018, el 23 de marzo quedó reconocido como el Día Nacional de la Conciliación y la Corresponsabilidad. El objetivo de marcar esta fecha en el calendario es concienciar a la sociedad de la importancia del reparto equilibrado de responsabilidades. La conciliación y la corresponsabilidad garantizan que se reduzcan las desigualdades entre mujeres y hombres en todos los ámbitos de la vida política, económica, social y cultural.

En este sentido, la Secretaría de Igualdad de USO considera que hay que trabajar por unos horarios racionales y flexibles, a través de la negociación colectiva. Estos permitirán a las familias poder adaptar el empleo a las tareas de cuidados de hijos y de familiares mayores dependientes.

Aun después de las diferentes normativas aprobadas en nuestro país, a día de hoy las cifras siguen mostrando esa falta de conciliación y corresponsabilidad. Históricamente los cuidados han sido realizados por mujeres, una mitad de la población que a día de hoy continúa haciendo esas tareas en mayor medida que los hombres. Siguen siendo ellas las que, con empleos de peor calidad y peor remunerados, renuncian a su desarrollo profesional pues el impacto sobre la economía familiar es menor que si el hombre abandona su trabajo.

Una de las grandes paradojas que vivimos es el continuo discurso demográfico de que hay que tener hijos. Pero cuando se tienen, sobre todo para las mujeres, empieza una dura carrera de obstáculos que, en muchos casos, supone para la mujer dejar al lado su proyecto de vida.

Compaginar vida personal y laboral sin tener que renunciar

En el Día Nacional de la Conciliación y la Corresponsabilidad se reivindican estos dos conceptos. Conciliar supone poder compaginar la vida personal y familiar con la laboral sin tener que renunciar a una parte de cada una de esas facetas de la vida a través de la reducción de jornada o las excedencias. Estas tienen repercusiones directas en el salario, en las carreras profesionales, y en las futuras pensiones de las mujeres.

Hoy también nos centramos en la importancia de la corresponsabilidad. Es decir, que padres y madres atiendas las tareas de cuidados, indistintamente, para que sean compatibles con el desarrollo de una carrera profesional plena para ambos progenitores.

Actualmente, la falta de conciliación y corresponsabilidad efectivas provocan que se acuda a familiares cercanos para organizar la vida personal y laboral. Y no solo para el cuidado de menores, sino también para cuidar a mayores dependientes. Estas situaciones requieren un gran esfuerzo económico por parte de las familias que provoca que muchas mujeres se vean obligadas a renunciar al trabajo.

Para paliar esta realidad, el Gobierno ha dado luz verde al Plan Corresponsables, proyecto piloto para crear una red de profesionales de cuidadores de menores de 14 años, que atiendan a estos mientras los progenitores trabajan.

Adaptar y regular el teletrabajo para que sea eficaz

En este año de pandemia el teletrabajo se ha hecho posible en situaciones que antes eran impensables. Sin embargo, la solución pasa ahora por adaptar y regular ese teletrabajo para que sea eficaz. Trabajar en casa y, al mismo tiempo, cuidar a la familia, produce una carga mental que se ha acrecentado en este periodo.

La salud mental se ha puesto a prueba. Calmantes para poder dormir y excitantes para poder despertar son cada día más habituales en nuestras familias para poder llegar a todo.