Más de 1.000 personas se han manifestado en Barcelona por la reindustrialización de Nissan. Casi un año después de que se anunciara el cierre de las plantas de Barcelona, no hay una apuesta clara de futuro

Por la reindustrialización de Nissan y por la defensa del tejido industrial en Cataluña. Ese fue el lema de la manifestación que ayer recorrió las céntricas calles de Barcelona y que reunió a más de 1.000 personas.

A punto de cumplirse un año del anuncio del cierre de las plantas de Nissan de Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca, SIGEN-USOC y el resto de sindicatos de Nissan, en lucha desde hace también un año, decidieron volver a las calles.

Miguel Ruiz, secretario general de SIGEN-USOC, explica que esta protesta es un toque de atención a las administraciones para que busquen la mejor solución para Nissan porque no hay alternativa al cierre. “Desgraciadamente no vemos una apuesta clara de las administraciones y no descartamos más movilizaciones, pues está en juego el futuro de los trabajadores de Nissan, pero también de los proveedores y contratas. Si no se hace algo ya, en diciembre desaparecerán miles de puestos de trabajo”, explica Ruiz.

En la última reunión de la mesa de reindustrialización de Nissan no se lograron grandes avances. En ella, se volvieron a analizar técnicamente los 40 proyectos de 36 empresas. Desde el comité de Nissan se recalcó la necesidad de contar con proyectos que preserven el tejido industrial que se pierde por la marcha de Nissan, y algunos de los que actualmente están sobre la mesa no cumplen esta premisa.

La reindustrialización de Nissan es una necesidad urgente. Los trabajadores necesitan una alternativa industrial clara y sólida que recupere la pérdida de puestos de trabajo y mantenga el tejido industrial en Cataluña.