La COP26 ha concluido con escasa ambición en temas fundamentales pero con avances en cuestiones sectoriales

Las partes intervinientes en la COP26 han agotado durante el pasado fin de semana -fuera de plazo- las negociaciones sobre la declaración de la conferencia con las conclusiones finales. El documento ha sido suscrito de forma unánime por los casi 200 países participantes.

Sin embargo, para lograrlo, han sido recortadas a última hora cuestiones claves como el objetivo de eliminar en plazos fijos el uso de combustibles fósiles u otras medidas concretas de calado.

Igualmente, la declaración final carece de vinculación jurídica expresa para las partes, por lo cual su cumplimiento queda a la voluntad unilateral de cada Estado. Algunos consideran, no obstante, que este documento sí se considera una guía de acción para las políticas de lucha contra el cambio climático .

Para la delegación sindical, este acuerdo permitirá que los países y las empresas renuncien a nuestra esperanza de un futuro seguro para los trabajadores. Las lagunas en los mecanismos del artículo 6 del Acuerdo de París sobre el comercio de emisiones socavarán la descarbonización rápida y profunda que se necesita.

Otra conclusión es que los países en desarrollo se van a casa sin garantías por el dinero que se les debe. No existen mecanismos concretos para ponerse al día con las promesas anteriores de compensación por importe de 100.000 millones de dólares al año. Solo se habla de un objetivo de financiación a largo plazo. Del mismo modo, se contemplan solo avances limitados en la adaptación al cambio climático y, sobre todo, ningún instrumento de pérdidas y daños, lo cual resulta vergonzoso, especialmente para la UE y Estados Unidos, que han argumentado en contra del progreso en ese apoyo urgente necesario.

Transición justa

El movimiento sindical ha valorado positivamente que se incorpore al lenguaje de la COP26 el término “transición justa”. Sin embargo, solo se ha conseguido en algunos documentos, no en todos los fundamentales. Los sindicatos han aplaudido los firmes compromisos que reflejan la declaración titulada “Apoyar las condiciones para una transición justa a nivel internacional” que han suscrito a nivel sectorial 14 gobiernos, entre ellos, el de España.

Desde los sindicatos instamos a las partes a que sigan trabajando por una transición justa que se refiera a puestos de trabajo, planes e inversiones. Con relación a ello se hace un llamamiento para que las partes intensifiquen sus Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) y creen los millones de empleos de buena calidad y trabajo decente con sus políticas y medidas climáticas, que el mundo requiere desesperadamente.

En su intervención final ante el último plenario de la COP26, el portavoz de la delegación sindical, el sindicalista escocés Richard Hardy, preguntó claramente a los gobiernos: “¿ a quiénes han estado ustedes escuchando durante esta conferencia? ¿Cómo se han quedado tan reducidos los objetivos sobre ambición, financiación, responsabilidad e inclusión?”. Con ello se expresa el descontento sindical, que USO comparte, sobre los resultados para los ciudadanos en general, y para las personas trabajadoras en particular.

Hardy pidió a todos los gobernantes que recuerden para las discusiones futuras que “los derechos laborales son derechos humanos, y que los sindicatos necesitamos una voz en la mesa en los procesos de diálogo social que generen empleo, planes de transición e inversiones justas”. El portavoz sindical terminó reclamando mayor ambición “como la que esperábamos aquí en Glasgow”.

Síntesis de la COP26

A modo de síntesis, la COP26 concluye de esta forma:

  • El documento tiene un gran avance sobre las subvenciones a los combustibles fósiles.
  • El acuerdo establece que la emisiones deben reducirse un 45% para el año 2030.
  • Las negociaciones han alcanzado un acuerdo sobre el comercio del carbón.
  • Por primera vez, se establecen objetivos respecto a la reducción de emisiones de metano.
  • Se ha alcanzado un consenso entre EEUU y China poco común sobre la cuestión climática.
  • Acuerdo entre 14 países sobre transición justa para los trabajadores y las comunidades locales.
  • Los países ricos no se comprometen claramente en materia de financiación.
  • Los expertos advierten que el acuerdo de comercio de carbono tiene debilidades.
  • Los países más vulnerables se quedan sin recursos para hacer frente al cambio climático.
  • Las promesas actuales a nivel nacional nos sitúan en un aumento de temperatura de 2,4º, muy por encima de los definidos en el Acuerdo de París.