La Escuela Concertada se ha quedado fuera del Plan de Reconstrucción en materia educativa, tanto en el borrador como en la Comisión Parlamentaria

La Federación de Enseñanza de USO lamenta que se haya aprovechado la profunda crisis originada por la pandemia del covid-19 y su intento de reconstrucción para avanzar en agendas ideológicas en materia educativa. Ahora, recuerda FEUSO, la única idea que debería motivar una acción política solidaria es el pragmatismo: detectar y resolver los problemas de la gente. Hay que fomentar lo que funciona y mejorarlo. No debe cambiarse el sistema educativo por la puerta de atrás, en tiempos de fatalidad, mientras se pide la unidad de todos y se actúa en beneficio de una parte.

El borrador presentado en materia de Educación para la reconstrucción ha sido ratificado en el Congreso por la Comisión de Reconstrucción Social y Económica. Así, la Enseñanza Concertada, que ha padecido exactamente los mismos problemas que la Pública durante estos meses, se queda fuera de los fondos de recuperación de 2.000 millones. Se trata de fondos extra para afrontar con garantías la vuelta a las aulas el próximo curso. La vuelta de un profesorado y un alumnado sostenido con fondos públicos, pero descartados ahora.

Tiempo para reflexionar sobre la realidad educativa

FEUSO pide a todas las fuerzas políticas presentes en la Comisión que hagan una lectura atenta de la realidad educativa de nuestro país. Está basada en la complementariedad de las redes educativas pública y concertada. Un sistema mixto que funciona y que hay que perfeccionar. El camino debe ser el del progreso desde los actuales equilibrios hacia una realidad mejor para todos, y en un esfuerzo compartido por todos.

La Federación de Enseñanza de USO llama a “elevar el listón de la política en España”. Este reparto viene a completar el uso político que se hace de la Educación, como se ha demostrado en la enésima ley educativa, la LOMLOE, obra de un cambio de Gobierno.

FEUSO repite hasta el hartazgo la necesidad de no hacer política con la Enseñanza, de sellar un gran pacto de Estado que permita contar con una ley de consenso y duradera.

La LOMLOE, además, se ha tramitado con prisas y sombras aprovechando el episodio más trágico de nuestra historia reciente: durante el estado de alarma.