La aerolínea Ryanair ha comunicado que mantendrá operativa la base de Girona, convirtiéndola en una base temporal. Para ello, la irlandesa ha ofrecido a cada trabajador, de forma individual, la opción de convertir sus contratos fijos en fijos discontinuos, es decir, siendo contratados durante nueve meses y, los otros tres restantes, en el paro. Por otro lado, la compañía mantiene su decisión de cerrar las bases canarias de Tenerife, Lanzarote y Gran Canaria.

De momento se desconoce el número total de trabajadores de la base de Ryanair en Girona, de un total de 164 entre tcp y pilotos, que se han acogido a este acuerdo individual con el que se mantiene la actividad temporal de Girona “a costa de reducir las condiciones laborales de la plantilla”, critica Lidia Arasanz, secretaria de Comunicación de USO-Ryanair. Los trabajadores que no se hayan acogido a este acuerdo individual serán despedidos en el marco del ERE, que al inicio del periodo de consultas afectaba a 432 trabajadores de las cuatro bases.

USO impugnará este acuerdo, que se ha realizado fuera de la negociación del ERE y en un ambiente de coacción, “y que incluye cláusulas ilegales como la pérdida de categoría profesional, pasando los tcp a ser considerados agentes de servicio al público, que tiene un impacto directo en los pluses salariales, así como la pérdida de la antigüedad y un recorte del 25% en el salario anual”, denuncia Arasanz.

“Estos nuevos contratos son una tomadura de pelo, una amenaza total hacia los trabajadores. Vamos a revisar todos y a asegurarnos de que cumplen con la legislación española”, concluye Arasanz.