El mes de agosto nos vuelve a dejar datos negativos en cuanto al empleo: el paro ha subido en 8.070 personas, situando la cifra total de parados registrados en las oficinas de empleo en 4.427.930 personas. Además, el número de afiliaciones a la Seguridad Social se reduce en 97.592 personas, y, aunque el número de contratos registrados en agosto se ha incrementado en un 8,81%, tan solo 72.955 son de carácter indefinido, lo que representa el 6,43% de todos los contratos.

USO considera que los datos conocidos hoy rompen con la tendencia “positiva” de creación de empleo registrada en los últimos meses, caracterizada por la precarización laboral y salarial que define el nuevo mercado de trabajo en España, una creación de empleo que en España es temporal, precaria y de estancamiento salarial.

Por ello, son necesarias medidas encaminadas a impulsar la innovación y la competitividad de la economía española para que el trabajo no se sustente, principalmente, en los sectores que nos han conducido a la crisis económica. 

Destacamos también el desplome del número de beneficiarios de prestaciones por desempleo, cuya tasa de cobertura ha sido del 60,59%, y el descenso de la cuantía media bruta de la prestación, que se sitúa en los 788,3 euros.

Desde USO solicitamos al Gobierno y a los agentes sociales que impulsen soluciones dirigidas a los hogares cuyos ingresos han descendido notablemente con la crisis, o han desaparecido totalmente, para no crear una nueva clase social aún más empobrecida que acrecente las desigualdades sociales.

Si el mercado laboral sigue creando empleos precarios y devaluando los salarios; si las personas sin empleo ven reducidas sus prestaciones; si hostelería, comercio y construcción siguen sustentando la economía española, la tan ansiada recuperación económica nunca será una realidad, sino un nuevo parche a un modelo económico que debe experimentar una profunda renovación para alejar los fantasmas del pasado.