Los centros penitenciarios españoles tienen un déficit de plantilla. Según cálculos de USO-Prisiones, actualmente faltan por cubrir 3.400 vacantes en las 84 cárceles y centros de inserción social repartidos por todo el territorio español.

La media de edad de la plantilla, según datos del Portal de Transparencia, sin computar a los funcionarios en segunda actividad que no ocupan plazas (mayores de 57 años), es de 49 años.

Por comunidades autónomas, Asturias es la región donde la plantilla de prisiones es mayor, con una media de 54 años, seguida de Melilla, con 53; Cantabria, Galicia y Castilla y León, con 52 años; La Rioja y Extremadura, con 51 años, y País Vasco con una media de 50 años.

La continua merma de personal en Instituciones Penitenciarias es un problema estructural que se lleva sufriendo desde hace varios años. “Las prisiones se están quedando sin personal y las plantillas sufren más agresiones y enfermedades profesionales por la elevada carga de trabajo”, denuncia José Manuel Rey, portavoz de USO-Prisiones.

“Por ello, es urgente una política de recursos humanos que dé respuesta a la preocupante falta de personal y al envejecimiento de la plantilla. Hace falta cubrir con urgencia las vacantes existentes y las que vendrán en unos años con las futuras jubilaciones”, reivindica el portavoz de USO-Prisiones.