Ni horas extraordinarias ni nocturnas ni la descarga del material. Las empresas de transporte de la Región de Murcia no pagan la jornada real a los trabajadores y la negociación del convenio sectorial se mantiene bloqueada en este punto porque la patronal se niega a introducir ese concepto a pesar de la obligación legal de computar fehacientemente el registro horario y de que los nuevos vehículos ya están dotados con un tacógrafo digital que permite cribar cada una de las tareas que efectúan los transportistas.

“Lo que pedimos es que desaparezca del convenio el concepto ‘plus de kilometraje’, que lleva vigente desde los años 90, y se pague el trabajo real. Ahora mismo, los transportistas cobran únicamente por kilómetro recorrido, cuando casi treinta años después ya tenemos medios para demostrar las horas reales de trabajo. Por eso, queremos introducir la ‘hora trabajada’ en el texto, que es por lo que se paga en todos los empleos y que, además, se ha visto reforzada por la normativa del registro horario”, explica José Sáez, secretario general de USO-Región de Murcia.

Según la patronal FROET, los tacógrafos permiten a los trabajadores manipular el tiempo efectivo de trabajo. Sin embargo, se contradicen a sí mismos al tirar por tierra el consenso alcanzado en diciembre de 2017 para “establecer una forma de retribución salarial tendente a la eliminación del cobro por distancia recorrida, adaptándolo a la realidad y necesidades actuales”.

“Seguimos con un método arcaico de retribución de los excesos de jornadas, y pretenden hacernos cómplices de un fraude a la Seguridad Social si firmamos la prolongación de este método. Hay que compensar esos excesos de jornada. Los conductores, para cumplir con la legislación, realizan una cantidad limitada de kilómetros, pero no de horas, pues no toda la jornada maratoniana es conducir. Además, se utiliza como método de premios y castigos, asignando a los trabajadores más beligerantes por sus derechos los recorridos más cortos, que generan menos ingresos a pesar de que la carga, descarga y mantenimiento llevan el mismo tiempo que para uno largo”, continúa Sáez.

USO, además de UGT y CCOO, está a la espera de la resolución de Inspección sobre el bloqueo del convenio, al entender que se debe a materia de pronunciamiento de la Autoridad Laboral, quien se muestra de primeras favorable al planteamiento de la parte social. Los trabajadores están dispuestos a iniciar un calendario de movilizaciones si tras las mediaciones no se llega a un acuerdo.